Condenan a exescolta de Carlos Pizarro por participar en magnicidio en abril de 1990

Después de seis años de juicio, Jaime Ernesto Gómez Muñoz (exescolta del candidato presidencial Carlos Pizarro) fue condenado en primera instancia a 20 años y tres meses en prisión. El condenado fue acusado de los delitos de concierto para delinquir, porte ilegal de armas y homicidio con fines terroristas agravado.

Tras la investigación de la Fiscalía General de la Nación, se concluyó que Jaime Ernesto Gómez Muñoz disparó en contra de Gerardo Gutiérrez Uribe, alias Yerry (quien fue el autor material del asesinato) para silenciarlo; esta conducta ya había sido repetida por otros agentes del DAS que estuvieron involucrados en otros asesinatos de líderes políticos de la época.

Dentro del marco investigativo del ente acusador, surgió un interrogante relacionado a la rotación de guardaespaldas del líder del movimiento M-19. Según la Fiscalía, el escolta no había hecho los méritos suficientes para asumir ese cargo teniendo en cuenta la dificultad con la que pasó sus estudios de escolta y el contexto de los asesinatos de otros líderes políticos.

Al respecto, se abrió una investigación contra el exdirector del Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, Miguel Maza Márquez. La Fiscalía también aseguró que, gracias a que hubo un debilitamiento progresivo del esquema de seguridad de Carlos Pizarro, el accionar de los sicarios se facilitó.

María José Pizarro, hija del candidato asesinado y senadora de la República, se refirió a la condena de Gómez Muñoz y dijo que su teoría sobre el involucramiento del DAS en el asesinato de su padre se corroboró, "se ratifica nuestra hipótesis: el DAS tuvo responsabilidad en el asesinato de Carlos Pizarro Leongómez. No vamos a desfallecer hasta esclarecer la verdad y saber quiénes fueron los máximos determinadores de su muerte".

El asesinato de Carlos Pizarro ocurrió el 26 de abril de 1990 cuando un sicario le disparó con una subametralladora por la espalda en pleno vuelo mientras el candidato viajaba de Bogotá a Barranquilla. Antes de la condena del exescolta, solo se habían condenado a los exjefes paramilitares Carlos y Fidel Castaño.