Continúan las protestas frente a EPM por la entrada en operación de Hidroituango

Hasta las afueras del edificio de EPM en Medellín se desplazaron miembros de las comunidades aguas abajo (Tarazá, Briceño, Valdivia y Caucasia) y arriba de Hidroituango (Sabanalarga, Toledo, Ituango, Briceño y San Andrés de Cuerquia)., quienes ya completan más de 24 horas de protestas, desde este miércoles 16 de noviembre.

Estas poblaciones se movilizaron para exigir garantías de cara a la entrada en operación de las dos primeras turbinas de Hidroituango. Desde el Movimiento Ríos Vivos aseguran que "nos genera mucho temor el anuncio de la puesta en marcha de las turbinas por parte de EPM, aun conociendo informes sobre los riesgos técnicos derivados de los defectos estructurales del proyecto y de las inestabilidades del macizo rocoso, riesgo evidenciado y denunciado a lo largo de los años por las comunidades afectadas por Hidroituango".

Empresas Públicas de Medellín (EPM) reitera que el proyecto cuenta con todas las medidas de seguridad para entrar en funcionamiento. El 15 de noviembre pasado, por ejemplo, se llevó a cabo un simulacro de evacuación de las comunidades aguas abajo con el que se buscó fortalecer la capacidad de respuesta ante una eventual emergencia. Sin embargo, hubo poca participación de la población.

Las molestias de las comunidades se incrementaron porque se realizó la primera prueba de operación de la turbina uno, la cual fue se llevó con éxito.

William Giraldo, vicepresidente de proyectos generación de energía de EPM y quien tienen el desarrollo del proyecto hidroeléctrico, sostuvo que "las pruebas no representan ningún riesgo para la comunidad".

"Son máquinas a las cuales venimos haciendo pruebas hace unos cuatro meses. Hemos realizado pruebas eléctricas y mecánicas. El giro de la unidad uno se hizo a muy baja velocidad}: entre seis y ocho revoluciones por minuto, comparado con las 180 revoluciones por minuto que girará cuando la turbina empiece a operar", agregó Giraldo.

Hidroituango, que suministrará 17% de la energía eléctrica de Colombia, tenía previsto prender las turbinas uno y dos antes de finalizar noviembre. Pero esta fecha se extenderá, precisamente, por el plan de contingencia exigido por el Gobierno Nacional.