Disidencias de las Farc asaltaron dos sedes del Banco Agrario en el norte del Cauca

El Cauca fue escenario de nuevos enfrentamientos entre las disidencias de las Farc y la Fuerza Pública en los municipios de Corinto y Caloto.

Los combates iniciaron en Caloto, donde, al parecer, integrantes de la columna Dagoberto Ramos hostigaron a la Policía en el casco urbano. En medio del ataque, el grupo armado atentó contra la sede del Banco Agrario, justo cuando ciudadanos se encontraban cobrando un subsidio entregado por el Gobierno. Además, instalaron dos cilindros explosivos en la zona.

Simultáneamente, en Corinto, hombres armados ingresaron a la misma entidad bancaria, perpetrando un robo. En este municipio, los enfrentamientos causaron daños a varios vehículos y a la infraestructura del cuerpo de bomberos local.

El alcalde de Corinto, Óscar Cifuentes, indicó que el monto del robo alcanzó casi los $15 millones. Por su parte, la Tercera División del Ejército confirmó que las tropas han intensificado su despliegue en la zona, desarrollando maniobras conjuntas con la Policía del Cauca para enfrentar la situación.

Por su parte, el Banco Agrario, a través de su presidente Hernando Chica Zuccardi, rechazó lo sucedido. En un comunicado, el directivo destacó que la "comunidad, especialmente las familias vulnerables beneficiarias de las transferencias monetarias de Renta Ciudadana y Devolución del IVA, es la más perjudicada por estos hechos". Debido a los ataques, el Banco Agrario se vio en la necesidad de suspender temporalmente los pagos de estos subsidios en las mencionadas localidades.

El presidente del Banco aclaró que, afortunadamente, no hubo daños materiales en las sedes de la entidad en Corinto y Caloto, y subrayó que "los funcionarios no sufrieron heridas, ni hubo pérdida de vidas humanas". No obstante, expresó su preocupación por las afectaciones a los servicios ofrecidos a la población más vulnerable.

Chica también indicó que el banco está en conversaciones con la Fuerza Pública y las autoridades locales para evaluar las condiciones necesarias para restablecer la atención al público en la zona, con el objetivo de minimizar los impactos sobre sus clientes y usuarios.