• Isabella Salazar Gaitán

viernes, 21 de junio de 2024

En Brigard Urrutia, la tecnología es esencial para la optimización de procesos a través de la automatización de flujos de trabajo o la investigación jurídica

Al igual que en otras profesiones, los abogados deben saber ‘de todo un poco’, para poder enfrentar distintos retos dentro de su labor; en este sentido, el tema tecnológico ya no es ajeno a esa biblioteca de conocimientos que deben tener hoy en día.

Para Isabel Fes Escoté, directora de Tecnología de Brigard Urrutia, los abogados hoy en día no deben solo comprender el derecho, sino también el funcionamiento de las tecnologías; además, de en algunos casos saber sobre programación y metodologías ágiles.

¿Cómo cambiaron los servicios legales con la entrada de nuevas tecnologías?

Los servicios legales han cambiado significativamente con la llegada de herramientas tecnológicas avanzadas que ayudan para la gestión de contratos, automatización de flujos de trabajo o la investigación jurídica, resolviendo problemas y optimizando la práctica legal.

En cuanto al perfil del profesional, vemos que los abogados ahora deben comprender no solo el derecho, sino también el funcionamiento de las tecnologías y, en algunos casos, incluso saber programación y metodologías ágiles, lo que está cambiando los requisitos laborales y la formación.

¿Cuáles han sido los beneficios de usar estas tecnologías?

En la práctica del litigio hemos hecho un esfuerzo significativo entorno a la digitalización de todos los expedientes de la firma. Sabemos que en la era de la información, tener datos de calidad es lo que nos permitirá desarrollar proyectos relevantes de analítica de datos e inteligencia artificial en el futuro cercano.

También, en la función judicial, el uso de nuevas tecnologías ha logrado descongestionar un sistema altamente demandado. Además de la digitalización de expedientes, el uso de herramientas de videollamada para llevar a cabo audiencias virtuales desde el inicio de la pandemia también ha sido determinante.

¿Actualmente usan herramientas basadas en IA?

Sí, desde hace varios años hemos adoptado diversas herramientas de inteligencia artificial. Empezamos en 2019 con soluciones de ‘machine learning’ en el proceso de revisión de horas facturables y ‘pricing’.

Además, utilizamos software avanzado para la investigación jurídica, que nos permite realizar búsquedas y análisis detallados de normativas, jurisprudencia y doctrina.

¿Cuáles son los mayores retos que supone la llegada de nuevas tecnologías?

Uno de los mayores desafíos es garantizar la seguridad, confidencialidad y privacidad de la información en un entorno digitalizado, lo cual requiere un debido seguimiento y mejora continua desde lo técnico, administrativo y legal.

Además, mantener a nuestro equipo humano constantemente actualizado en conocimientos y habilidades para utilizar estas nuevas herramientas emergentes también representa un compromiso y requiere una disciplina considerable por parte de nuestros asociados.

¿Qué conflictos legales son los más comunes tras la llegada tecnologías como la IA?

Los conflictos más comunes incluyen el cumplimiento normativo de operaciones masivas apalancadas en tecnología, la gestión de riesgos, la privacidad de la información y los datos personales en casos como el reconocimiento facial, la discriminación en el otorgamiento de créditos y litigios por responsabilidad en accidentes con sistemas autónomos, como los vehículos auto conducidos.

Estas áreas tradicionales se están adaptando para integrar el entendimiento de la ley con los nuevos avancen tecnológicos que se llegan rápidamente, requiriendo una convergencia de habilidades y conocimientos de ambos campos.

En temas de derecho de autor con la llegada de la IA, ¿qué servicios se han prestado desde la firma?

Los servicios que Brigard Urrutia ha ofrecido frente a los riesgos asociados al uso de herramientas como la IA han sido consultas para evitar futuros conflictos en materia de derechos de autor, protección de datos personales, confidencialidad de la información, y la gestión de riesgos ética y jurídicos en general.

En la firma, ¿se han creado nuevas áreas de práctica por la masificación de tecnologías como la IA?

No se han creado nuevas áreas de práctica, pero sí se han fortalecido las áreas existentes teniendo en cuenta los desafíos y particularidades en la nueva forma de hacer negocios que ha traído temas como la IA. La firma ha desarrollado servicios especializados para abordar estos retos, liderados por la experiencia en el campo legal.

¿Cómo se trabaja sin una legislación vigente para nuevos temas tecnológicos?

Es cierto que en Colombia no se cuenta con una regulación específica sobre Inteligencia Artificial, por ejemplo; sin embargo, en el Congreso de la República se encuentran en curso seis proyectos de ley que regularían aspectos relacionados con IA, donde valdría la pena unificar estos proyectos que se presentan por separado para su robustecimiento.

Mientras estos proyectos avanzan, los vacíos actuales se podrían llenar a través de las interpretaciones de las normas existentes.

Los abogados deben utilizar su conocimiento y habilidades para aplicar principios legales tradicionales a estos nuevos contextos, asegurando así que los derechos y responsabilidades estén protegidos y regulados de forma adecuada.

Contexto

Isabel Fes Escoté, directora de Tecnología de Brigard Urrutia, aseguró que para la firma es fundamental el desarrollo de habilidades blandas y técnicas en sus profesionales para hacerle frente a la llegada de nuevas tecnologías, esto desde la gestión interna con la adopción de nuevas herramientas que mejoren los procesos de la firma; como también, a partir del acompañamiento a los clientes para afrontar los retos que han traído los rápidos avances tecnológicos dentro de cada industria.