Este es el balance de la primera legislatura de Duque

La primera legislatura durante el Gobierno de Iván Duque cerró este 20 de junio. Aunque el mandatario pudo sacar adelante el Plan Nacional de Desarrollo, la Ley de Financiamiento y el proyecto que reestructura el sector de las telecomunicaciones, no hubo mucha unión entre los parlamentarios y el ejecutivo.

El primer gran desencuentro que se llevó el mandatario durante este período de discusiones parlamentarias fue el debate por las objeciones de la JEP. Más de la mitad del primer semestre de este año fue marcado por los peros que impuso el presidente a la norma de funcionamiento de la jurisdicción de paz.

Aunque el presidente dijo que no se arrepiente de las objeciones porque las presentó por “principios”, varios congresistas aseguraron que este debate solo sirvió para polarizar más a las fuerzas políticas y perder tiempos de discusión.

Así lo sostiene el senador, Fabián Castillo, del partido Cambio Radical, quien dijo que “aunque sí perdimos tiempo con el tema de las objeciones, debo reconocer que hubo iniciativas del presidente que salieron adelante. El tema de la Ley TIC fue muy importante”. Para Castillo, “la estrategia del Gobierno debe centrarse más en consensos políticos”.

Entre las leyes que pudo sancionar el presidente en esta primera legislatura, y que son de iniciativa propia, se encuentran la Ley de Financiamiento, el Plan Nacional de Desarrollo, la prórroga al sistema regional de regalías, y el Presupuesto del año. Normas que, según la jerga del Congreso, son de trámite porque sirven para el desarrollo normal en el funcionamiento del Estado.

Sin embargo, las dos reformas que se esperaran que llegaran con fuerza para unir a las mayorías en el Congreso no lograron superar el trámite. La reforma política y la reforma a la justicia fueron dos proyectos que evidenciaron unas relaciones distantes entre el ejecutivo y el legislativo.

La victoria para el Gobierno está en la Ley TIC. Esta norma recibió muchas críticas por parte de los sectores opositores, debido a las regulaciones que traía frente a la televisión pública. Sin embargo, la iniciativa logró consolidar un proyecto para aumentar la participación en el mercado de grandes jugadores y ampliar la cobertura en las regiones.

Otras normas que se aprobaron en esta legislatura fueron los beneficios tributarios para los vehículos eléctricos y la prohibición del asbesto. Dos iniciativas que provenían de períodos anteriores.

Además, el presidente tuvo que sancionar el Código Disciplinario, y la Estatutaria de la JEP.

Un capítulo complicado para el Congreso de la República fue el de las iniciativas anticorrupción. Aunque el Estatuto fue aprobado por las plenarias, se hundió en el proceso de conciliación entre las cámaras.

El analista Guillermo Tobón dijo que “esto marcó el hito de la decadencia en el Congreso. Aquí hay un caos absurdo y en el Ejecutivo no hay un rumbo fijo para sacar esto adelante”.

El analista Vicente Torrijos cree que “la crisis es por la falta de consensos, que intentaron ocultar con estrategias de populismo creativo”.

La próxima legislatura iniciará el 20 de julio. Los actos legislativos para reformar las regalías, y la reforma a la Justicia serán los retos con los que tendrá que lidiar el presidente.