Justicia Especial para la Paz y manejo de recursos ponen en líos al posconflicto

Justo antes de terminar el periodo presidencial de Juan Manuel Santos, que ha dedicado gran parte de sus esfuerzos a consolidar la paz alcanzada con las Farc, el posconflicto se ha visto golpeado por dos situaciones adversas apenas empezando abril: los embajadores de Noruega, Suecia y Suiza se pronunciaron sobre el manejo que se le están dando a los recursos entregados por estos países para el posconflicto, y Néstor Raúl Correa, secretario de la Justicia Especial para la Paz (JEP), renunció a su cargo.

En una misiva, los embajadores de los tres países, que junto con el Gobierno Nacional conforman el comité directivo solicitaban convocar una reunión para hablar de la administración que Colombia le ha dado a los recursos para el posconflicto, que sumarían cerca de US$200 millones.

“No hay razón para el nerviosismo, yo tuve la oportunidad de reunirme en Argentina con los representantes de los tres países, en donde el planeamiento que hicieron es que quieren estar muy de cerca y seguir minuciosamente el proceso de selección de la persona que va a dirigir el Fondo Colombia Sostenible”, explicó el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría.

Adicionalmente, ayer se confirmó que Correa, el secretario de la JEP, renunció a su cargo y acompañará la Justicia Especial hasta el próximo 30 de abril. Según la información en medios, Correa dijo que su labor ya está terminada según estaba concebida inicialmente, y que al cambiar el sistema de gobierno de la JEP él debía hacerse a un lado. Correa se posesionó el 11 de febrero de 2017 ante el presidente Santos y fue elegido por un comité de Naciones Unidas.

Sin embargo, sorprende el momento de la renuncia, pues esta semana, el contralor Edgardo Maya, le pidió al Secretario Ejecutivo de la JEP un informe sobre la ejecución de los recursos que le entregaron a la entidad para su primer año de funcionamiento.