Diseños industriales: nuevas oportunidades

Producto de la globalización y las cambiantes dinámicas de consumo en el mercado global, la estética se ha convertido en un elemento fundamental al momento de ofrecer bienes y servicios en el comercio. Cada vez más, los consumidores buscan que aquello que compren esté dotado de elementos, formas, colores, y en general diseños estéticamente atractivos. Entendiendo estas tendencias, la normativa andina en su Decisión 486 de 2000 otorgó especial protección mediante diseño industrial a aquellos patrones, trazados, y configuraciones estéticas que dotaran de una apariencia particular el producto, sin cambiar su destinación o finalidad.

En la materia, este año la Oficina de Nuevas Creaciones de la Superindustria abrió una ventana de oportunidades para la industria de la moda, específicamente en cuanto a diseño de carteras y maletines.

Mediante resolución de mayo del presente año, la Oficina de Nuevas Creaciones otorgó el diseño industrial a la manija de una cartera, al considerar que cumplía con los requisitos propios para este tipo de protección. Ésta fue otorgada a la marca de carteras y bolsos Lauval, luego de considerar que efectivamente el diseño solicitado (i) tenía un diseño particular e innovador sin cambiar la destinación o finalidad del producto, y (ii) era novedoso, en el sentido de no existir un diseño similar previamente conocido públicamente.

Al otorgar este registro, la Oficina de Nuevas Creaciones abre la puerta para la protección de diseños de carteras y maletines, que históricamente en Colombia no se habían protegido en gran cantidad, y sólo contados casos habían logrado el diseño industrial en este segmento de la moda. De hecho, actualmente el único diseño industrial registrado en Colombia para la clasificación 03.01 de Locarno (referente a maletas, maletines, carteras, bolsos, y demás) es el concedido a Lauvalen mayo de este año. Sin embargo, luego de la decisión ya hay varias solicitudes en trámite para el registro de carteras como diseños industriales.

De esta forma, la decisión adoptada por la Oficina de Nuevas Creaciones abrió un abanico de posibilidades para proteger los diseños que cumplan con los requisitos propios que trae el artículo 113 de la Decisión 486. Esto, en materia de propiedad intelectual crea un incentivo a la innovación al interior de las empresas en la industria de la moda, y amplía el campo de acción para las firmas y abogados dedicados a la materia para fortalecer sus solicitudes y argumentación a la hora de buscar defender los intereses de sus clientes en la industria.

Sin duda alguna, la posición que adopta la Superindustria al haber proferido la decisión abre un debate en materia de propiedad intelectual, rompiendo con paradigmas tradicionales donde la protección mediante diseño industrial de creaciones en la industria de la moda no era muy explorada.

Además, la protección incentiva a las empresas a invertir tiempo y recursos en el desarrollo diseños novedosos e innovadores, que una vez registrados podrán incrementar sus ingresos y posicionarlas en el mercado de manera efectiva, y al final generarán dinámicas en el mercado que repercutirán en mayor oferta para los consumidores y una sana competencia elevada al campo de la propiedad intelectual.