Críticas al proyecto que busca regular la venta de vapeadores y cigarrillos electrónicos

El Congreso de la República inició una nueva discusión para regularizar el uso de vapeadores y cigarrillos electrónicos. Este es el sexto intento para reglamentar estos dispositivos, que tienen muchos vacíos legales al no poder equipararse con los cigarrillos tradicionales.

Los vapeadores surgen como alternativa al consumo de tabaco y muchos fumadores dejan el cigarrillo gracias a los dispositivos tecnológicos. Pero, al no estar regulado, cualquier persona puede consumirlo sin problemas, incluyendo los menores de edad.

Un joven de 14 años o menos puede ir hoy en día a un establecimiento y comprar un vapeador o un cigarrillo electrónico sin ninguna restricción. O también puede adquirirlo por cualquiera de las tiendas virtuales como Mercado Libre, Linio, Shopee, entre otras.

De acuerdo con Julián Quintero, sociólogo investigador y director de la corporación ATS, hay evidencia de que las personas que fuman cigarrillo y que son dependientes a la nicotina, al pasar a los vapeadores, siguen con el uso de la nicotina dejando el cigarrillo.

El experto señala que el cigarrillo suministra nicotina por medio de la combustión, es decir, que se quema la materia vegetal. Mientras que los vapeadores y calentadores de tabaco lo hacen mediante el uso de vapores y desarrollos tecnológicos.

La iniciativa que se radicó en el Congreso en diciembre de 2022 y que se empezó a discutir esta semana busca prohibir la venta de estos dispositivos electrónicos a los menores de edad y establece medidas para evitar que los menores tengan acceso a ellos.

Además, se busca que los cigarrillos electrónicos que se vendan en Colombia contengan las advertencias necesarias sobre la adicción que pueden generar.

Así mismo, las máquinas expendedoras o dispensadores de cigarrillos electrónicos serán prohibidos en sitios de fácil acceso de menores de edad.

La Asociación Colombiana de Vapeadores, Asovape, apoyó la idea de regularizar el comercio de los dispositivos para que los menores no tengan acceso a ellos, pero pidió respetar a los mayores de edad que deciden utilizarlos como alternativa al cigarrillo.

Para Quintero, este proyecto tiene varios problemas técnicos que lo hacen inviable. “El proyecto, desde nuestra perspectiva, no es viable técnicamente porque intenta incorporar los dispositivos electrónicos a la regulación del cigarrillo. Y, claramente, los cigarrillos y los dispositivos electrónicos son dos formas diferentes de uso de nicotina”, señala.

“De entrada, creemos que es un proyecto técnicamente inconveniente. Sí creemos que se debe regular el uso de vapeadores, pero de manera diferenciada. El uso de vapeadores y dispositivos electrónicos necesitan una legislación diferente”, explicó Quintero.

Asegura que al equiparar estos dispositivos con los cigarrillos tradicionales se invisibiliza su impacto en la salud pública. Dice que se dificultará la investigación y campañas de manera diferenciada.