El empresario Carlos Mattos fue trasladado a cárcel de máxima seguridad de Cómbita, en Boyacá

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Después de que Noticias Caracol revelara que, a pesar de la medida de aseguramiento en centro carcelario, Carlos Mattos salió de la cárcel La Picota y se movilizó en carros del Inpec para asistir a reuniones en una oficina en Bogotá, entre otros con su abogado, Iván Cancino, el ministro de Justicia, Wilson Ruiz Orejuela, ordenó su traslado a la prisión de máxima seguridad de Cómbita, en Boyacá.

Además, relevó de su cargo al director del centro penitenciario, el coronel en retiro Wilmer Valencia, y al director del Inpec, general Mariano Botero Coy. En reemplazo de este último, el Ministerio encargó al coronel Joaquín Medrano, actual subdirector del Instituto.

Los entes de control también reaccionaron de inmediato. La Procuraduría abrió indagación preliminar contra los funcionarios del Inpec y la cárcel, para establecer responsabilidades.

Por su parte, la Fiscalía dijo que el funcionario que lleva los procesos del empresario compulsará copias para establecer si quienes estuvieron a cargo de sus traslados incurrieron en algún delito.

Además, señaló que los dos preacuerdos suscritos con Mattos, que todavía deben ser aprobados por los jueces, no se verán afectados por este episodio, y reiteró que esos acuerdos “no existe, ni se habla de este tipo de condiciones, ni de autorizaciones para salidas o permisos”.

De manera paralela, la Comisión Nacional de Disciplina Judicial remitió la información a la Comisión Seccional de Bogotá para que investigue si hubo faltas disciplinarias en el ejercicio de la profesión del abogado.

En diálogo con La FM, Cancino, explicó que sabía que su defendido había salido con la excusa de atender controles médicos, y reiteró que no tiene conocimiento de salidas adicionales por otros conceptos.