Cese al fuego tras diálogos entre el Gobierno y disidencias del Estado Mayor Central

En el recinto deportivo de Tibú, Norte de Santander, se vivieron momentos de alta tensión durante la instalación de la mesa de diálogos entre el Gobierno y las disidencias del Estado Mayor Central.

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Representantes de diversas regiones tomaron la tarima para exigir de manera enérgica el cese del fuego, elevando la incertidumbre en el ambiente.En un giro, Andrey Avendaño, vocero de la guerrilla, descendió de la tarima, desatando especulaciones sobre la continuidad de las conversaciones.

Aunque Avendaño retornó a su asiento minutos después, permaneció tras la tarima por un lapso considerable, sosteniendo una acalorada discusión con otro delegado de la organización. La comunidad, consternada, reportó que no se llegaría a un acuerdo hasta que el Gobierno firmara el compromiso de cese del fuego.

En este contexto, las comunidades señalaron al Ejecutivo como responsable de la falta de progresos en el pacto. Incluso recordaron al presidente Gustavo Petro que su ascenso al poder se debió en gran medida a la fuerza de los movimientos sociales, sugiriendo que de igual manera podrían retirarlo de su cargo.

Después de una prolongada situación de tensión, se anunció en el polideportivo que el cese de operaciones ofensivas sería una realidad.

Fue Danilo Rueda, comisionado de Paz, quien comunicó el hito histórico, "con la aprobación del presidente, se ha tomado la decisión de suspender a partir de la medianoche de hoy las operaciones ofensivas. Este es el primer paso en un proceso que se forjará en los territorios", afirmó Rueda.

A través de un comunicado oficial, se informó que a partir de este domingo se detendrán las acciones ofensivas. Sin embargo, el decreto formal que oficializa el cese del fuego será emitido el 16 de octubre.

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Esta demora se justifica en la necesidad de ultimar varios aspectos de preparación previa para su implementación.