Colombia, una vez más, es el país con más asesinatos de líderes sociales en el mundo

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En el Análisis Global 2022 de Front Line Defenders se dio a conocer que México, Colombia, Ucrania, Brasil y Honduras reunieron el 80% de los asesinatos contra defensores de derechos humanos y medio ambientales.

En el caso de México, de los 401 defensores de derechos humanos asesinados durante el año pasado, México sumó 45 de estos crímenes, lo que representa un total del 11.22% del total.

Estas cifras muestran un aumento de tres asesinatos más, respecto a los 42 que, según las cifras de la red de organizaciones de derechos humanos, acontecieron en México a lo largo de 2021. Este cambio significa un aumento del 7.14 por ciento.

Durante 2022, a nivel mundial, México se ubicó como la tercera nación con más asesinatos contra defensores de derechos humanos en todo el mundo, sólo se ubicó detrás de Colombia, que registró 186 asesinatos, y Ucrania que tuvo 50 crímenes de este tipo.

Según las cifras de HRD Memorial, de los casos presentados en todo el mundo, el 48% de los defensores de derechos humanos asesinados (192 personas) trabajaban en la defensa de la tierra, ambiental y de los pueblos indígenas.

Por otro lado, el 22% (88 personas) de los asesinatos cometidos fueron en contra de personas indígenas defensoras de derechos humanos y el 17% (68 personas) fue en contra de mujeres defensoras de derechos humanos (incluyendo a mujeres trans).

El informe del año pasado detalló que, en la República mexicana, en especial en los estados de Oaxaca, Guerrero, Chihuahua y Chiapas, los defensores de derechos humanos de los pueblos indígenas y sus comunidades —que defendían sus tierras y territorios— fueron blancos de ataques armados, desapariciones forzadas, violencia y asesinatos.

Además, señalaron que en la República mexicana, junto a países como Bolivia, Brasil, Canadá, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, entre otros del continente, estos defensores enfrentaron estos delitos, mientras autoridades, empresas, terratenientes y agricultores buscaban promover más sus intereses comerciales, mediante la expropiación violenta de tierras.

Por otro lado, señalaron que México, una vez más, fue el país más mortífero del mundo para la labor periodística con un total de 12 asesinatos contra comunicadores, a lo largo de todo el año pasado.