La semana pasada entró en vigor, parcialmente, el nuevo reglamento sobre agentes de fútbol. Este reglamento es el fruto de años de trabajo en los que FIFA y varias partes interesadas colaboraron. El 16 de diciembre se aprobó el reglamento que se expidió con dos anexos explicativos y el reglamento para los exámenes para obtener la licencia FIFA.
Desde la decisión Bosman, a finales del siglo pasado, y frente a la imposibilidad de retener a los jugadores por un tiempo adicional al de la vigencia de los contratos de trabajo, la figura del agente tomó preponderancia. La relación jugador trabajador, club empleador se modificó dramáticamente; el club perdió poder, ya no se trataba del deseo o la imposición del presidente del club frente a un jugador con el que ni siquiera era necesario tener contrato de trabajo. Del otro lado de la relación laboral el jugador, que tenía y tiene claro que en algún momento su contrato terminará y por lo tanto podrá buscar suerte en otro equipo ganó peso. Había que negociar, salarios, duración del contrato y muchos aspectos adicionales hasta ese momento ignorados.
Es este momento donde el agente tomó fuerza y se hizo necesario en el mundo del fútbol; poco a poco ganaron poder hasta el punto de que FIFA vio la necesidad de controlarlos, mediante otorgamiento de licencias que se obtenían luego de aprobar un examen y constituir pólizas para garantizar el estricto cumplimiento de sus labores. Por alguna razón que desconozco FIFA dejó de controlar a estas personas y le encomendó esta labor a las federaciones nacionales que otorgaban licencias prácticamente a cualquier persona que tuviera algo de dinero y dos fotos.
El poder que alcanzaron varios de estos agentes con esquemas poco claros de negocio hizo que FIFA expidiera la reglamentación mencionada para controlarlos. Para esto se vuelve a el sistema de examen para el otorgamiento de licencias lo que permite, en principio, personas más preparadas para desarrollar esta labor.
El reglamento regula la actividad en general, da reglas específicas en cuanto a remuneración, plazos de contratación, tratamiento de los menores de edad futbolistas publicación de actividades y resolución de disputas.
Uno de los temas más interesantes tiene que ver con el pago de las comisiones, que, deben ser realizados a través de la Cámara de Compensación de FIFA. Todavía no sabemos cómo funcionará frente a los pagos de los agentes pero no cabe duda de que el control sobre las comisiones será importante. Adicionalmente, de manera periódica FIFA publicará nombres e información de todos los agentes de fútbol, los clientes a los que representa cada agente de fútbol, así como la vigencia y exclusividad o no exclusividad de su contrato de representación, los servicios de representación que prestan a cada cliente, toda sanción impuesta a un agente de fútbol o a un cliente y los datos de todas las transacciones en las que participen agentes de fútbol, incluidos los honorarios que perciban. Transparencia antes que nada, indica FIFA.
Los conflictos surgidos por esta actividad pueden ser llevadas a Lajusticia ordinaria o a la Cámara de Agentes del Tribunal del Fútbol que FIFA dirige. Este tribunal funciona bastante bien y permite en muy poco tiempo solucionar disputas relacionadas con el fútbol.
Finalmente aquellos agentes que tenían una licencia previa a la expedición de esta norma podrán continuar ejerciendo luego de cumplir algunos requisitos formales. Esperemos un tiempo para ver los resultados de esta nueva reglamentación.
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