Gobierno se prepara para posible escenario de descertificación en lucha antidrogas

La canciller Laura Sarabia se refirió a la relación entre Colombia y EE.UU. y aseguró que en las mesas de diálogo conjuntas el objetivo es exhibir los avances del país frente a la erradicación y sustitución de cultivos para uso ilícito de cara a la certificación que avala el país norteamericano.

"Nos preparamos para un escenario de certificación, que es a lo que le estamos apostando en nuestro país con cada una de las acciones que hacemos, pero también nos preparamos para un escenario de descertificación en el cual no quisiera ahondar porque es un escenario hipotético", afirmó la funcionaria.

Agregó que "hoy estamos trabajando para mostrar que estamos luchando contra las drogas, que estamos tratando de construir un plan estructurado para la disminución de cultivos ilícitos y esperamos que los resultados se evidencien en una certificación por parte de Estados Unidos".

Durante un espacio con periodistas, Sarabia manifestó que la lucha contra el narcotráfico "no solo ha sido un pedido de EE.UU. sino del presidente Gustavo Petro", quien según la canciller, ha solicitado más que resultados en la erradicación y apunta a la transformación del territorio.

"Hoy puede que se erradique, pero si no le brindas una opción al campesino, lo más seguro es que a las pocas semanas tenga que volver a esos cultivos con fines ilícitos, hemos apostado a una erradicación sostenible. La meta es llegar a 30.000 hectáreas de erradicación voluntaria", añadió.

Tras la visita de la secretaria de Seguridad Nacional de EE.UU., Kristi Noem, Sarabia aseguró que el altercado entre el presidente Gustavo Petro y su homólogo Donald Trump, por la política de deportación de migrantes, "es un impasse completamente superado".

La canciller hizo énfasis en que toda relación bilateral tiene desafíos, pero indicó que "el resultado de la visita de la secretaria Noem es muestra de una relación sólida en la se que sigue trabajando para alcanzar resultados conjuntos".

Sobre la política de erradicación y sustitución, la canciller señaló que "no hemos ganado la batalla y falta mucho, pero buscamos que sea sostenible y podamos transformar esas economías ilícitas".