Hace varios meses escribí un análisis sobre cuidar la reputación en línea y el presente artículo viene siendo un complemento a este. Como personas (y profesionales) podemos usar internet y herramientas como Google para nuestro beneficio. En este orden de ideas, internet nos puede ayudar para promocionar quiénes somos y qué hacemos.
Para descubrirnos en internet, le propongo un pequeño ejercicio. Ingrese a su computador, tablet o teléfono inteligente, vaya a google.com y en el campo de búsqueda ingrese su nombre. Como es posible que tenga varios homónimos, sugiero que ingrese su nombre completo, con primer y segundo apellido. ¿Qué encontró? Si se encontró a sí mismo, por ejemplo con su perfil de alguna red social como LinkedIn, Facebook o Twitter, esto está bien. De hecho, esto es lo usual. Pero, ¿qué más encontró?
En el gran universo de internet es mucho lo que podemos encontrar. Con esta búsqueda es posible que encuentre páginas que hablan de usted y de las cuáles no sabía nada. Además estás páginas pueden ser positivas o negativas. O quizás encontró otras personas con el mismo nombre haciendo cosas inimaginables.
Después de este ejercicio, mi primera recomendación es que no olvidemos nunca que internet se ha convertido para muchos en la primera fuente de información. Por ejemplo, hay empresas que antes de contratar un posible empleado, buscan referencias de este en redes sociales y en el propio Google. De esta forma puede confirmar si lo que un aspirante dijo en su hoja de vidas y entrevistas es cierto o no.
Pero más allá de que esté o no esté buscando empleo, internet nos puede servir para muchas otras cosas, como contactos, posibles negocios y más. Esto me lleva a la segunda recomendación y es invertir tiempo en nuestra presencia en internet. Las redes sociales, principalmente las profesionales como LinkedIn nos pueden ayudar mucho, pero no debemos limitarnos a estos. Hay servicios para crear páginas “acerca de mi”, como About.me, en las que puede crear su perfil, subir una foto y permitir que quien lo busque lo contacte. Igualmente es buena idea comprar un dominio personal, del estilo sunombre.com.
Yo a principios del milenio decidí comprar mi propio dominio. Ha sido una buena inversión, tomando en cuenta que mi primer nombre y mi primer apellido son bastante comunes, al punto que hasta comparto el nombre con un importante ex tenista ecuatoriano. Esto me ha funcionado bastante bien y junto con otras técnicas que he usado. Lo invito a buscar mi nombre completo en Google para que mire lo que he estado haciendo y cómo me he posicionado. Las búsquedas de nombres de personas, especialmente famosos o con cargos importantes ha llevado a que por ejemplo sean usadas por quienes buscan empleo.
Hay reportes de personas que han pagado publicidad en Google y cuando alguien busca un nombre de estos, sale un aviso dirigido para esta persona ofreciéndole sus servicios. La idea es que eventualmente la persona se busque a sí misma en Google y encuentre este anuncio.
Además de lo anterior, hay una herramienta que se llama Klout que mide nuestra influencia en redes sociales. Ellos tienen un algoritmo que nos da una calificación entre 0 y 100, dónde 100 significa que tenemos gran influencia en este medio. Aunque esto parece una herramienta con poco sentido, es usada por empresas para contratar ciertos empleados, por ejemplo aquellos que tienen que relacionarse con medios de comunicación y clientes. También se ha visto como empresas que detectan usuarios/clientes de redes sociales con altas calificaciones en Klout, les ofrecen productos gratis, asensos y otros, con el ánimo de que difundan y promocionen las marcas a otros usuarios.
Si nunca ha hecho nada por promocionarse en internet, es hora de hacerlo. No es difícil, es mayormente gratuito y podrá obtener grandes beneficios.
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