Ante el panorama social y económico que vivimos como comunidad global derivado del covid-19, se hace imperante pensar cómo se puede aportar de manera efectiva para contribuir a una rápida recuperación de nuestras sociedades.
Es por ello por lo que los abogados asesores de empresas (y a su vez en muchas ocasiones abogados empresarios) tenemos el deber de reevaluar nuestras habilidades, para ser capaces de dar respuesta a los retos de los tiempos que vivimos.
Repensar nuestra profesión durante el presente periodo de transición y prepararnos ante un entorno post-pandemia es un deber profesional, el cual nos reclama estar a la altura de la transición hacia la nueva normalidad. Por tanto, recomiendo que nos enfoquemos en las siguientes cinco necesidades que toda empresa requerirá para una recuperación efectiva post-covid:
1. Asesoría jurídica con visión de negocio: No es suficiente tener claridad y conocimiento del ordenamiento jurídico y su aplicación; nuestra profesión debe servir al propósito de rentabilizar las actividades de las empresas mientras mitigamos los riesgos. Importante empaparse de cuales son los negocios de nuestros clientes, entendiendo sus necesidades y dando una asesoría integral, donde lo jurídico sea solo una herramienta más.
2. Dar prioridad a la caja de las empresas: Cerrar rápidamente la negociación de contratos con criterios y términos de pago adecuados es de la esencia. Cobrar efectivamente, cerrar acuerdos de pago efectivos y negociar métodos alternativos de pago. La caja es el pulmón de cualquier actividad económica.
3. Desarrollar contratos complejos en formatos simples: El excesivo formalismo y extensión de contratos, degenera la función jurídica. Contratos claros y sencillos (o proformas internacionales como FIDIC) son amigos de una ejecución saludable y estandarizada.
4. Internacionalización jurídica y empresarial: Si bien la recuperación de esta pandemia empieza en casa, los países necesitan encontrar sinergias para apoyarse en una etapa post-covid. Conocer normativa internacional esencial y fortalecer el inglés jurídico como “nuevo latín” es esencial.
5. Estrategias de negociación y desescalada de litigios: Muchos empresarios no podrán recuperarse en un corto plazo después de superada la pandemia. Es ideal encontrar arreglos y tratos que permitan mantener relaciones de largo plazo evitando desgastes ante jueces o árbitros, que terminarán en sentencias y/o laudos de papel.
Finalmente, pongo sobre la mesa una necesidad general de ayer, hoy y siempre que es realizar una adecuada Debida Diligencia.
Hoy en día, esto cobra mayor relevancia dado que nuestros socios de negocio existentes han sufrido cambios durante el periodo de la cuarentena, que pueden haber modificado de manera sustancial su capacidad económica. Ello permitirá asignar de manera adecuada cupos de crédito y contar con unos u otros en futuros desarrollos de negocio.
Con la seguridad de que tanto Colombia como el mundo saldrán adelante de este momento oscuro que estamos vivinedo y que haremos una transición hacia una mejor normalidad, saludo a mis queridos lectores y a sus familias, deseando que pase pronto la oscura noche.
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