Las implicaciones laborales que tienen las nuevas medidas de cuarentena por covid

El pasado 7 de enero, el Ministerio de Salud dictó nuevas disposiciones relacionadas con la cuarentena ante síntomas de covid-19. La entidad redujo el tiempo de aislamiento de 14 a siete días ante cualquier síntoma relacionado con el virus. No obstante, los empresarios del país han mostrado preocupación ante los vacíos legales de la medida, por situaciones como la falta de excusa médica y eventuales abusos.

El Minsalud dictó los nuevos parámetros con ocasión del avance de la variante Ómicron. De esta manera, las personas con síntomatología relacionada al covid-19, como flujo nasal, fiebre, dolor de cabeza y malestar general, deberán guardar una cuarentena de siete días.

El problema en el entorno laboral es que esta cuarentena de una semana no genera una incapacidad certificada por un médico de una EPS, lo que despierta malestar en las empresas.

“Se está generando un conflicto porque el empleador no puede presionar para que el trabajador vuelva a su puesto, pues generaría un foco de contagio”, dijo Iván Jaramillo, investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario.

Según el experto, es importante que se piense en un equilibrio que no afecte al trabajador ni al empleador. Una primera solución, que podría ser útil para muchos empleadores, es implementar la modalidad de trabajo a distancia. “En caso de que los síntomas no afecten la capacidad laboral del trabajador, en la medida en que el cargo lo permita, es posible optar por las alternativas de trabajo a distancia”, afirmó Diana Zuleta, directora del área de práctica de Derecho Laboral de DLA Piper Martínez Beltrán. En la actualidad, en Colombia está regulada esta modalidad laboral, además del teletrabajo y el trabajo en casa.

Trabajadores presenciales

Según los expertos, el trabajo remoto podría ser una solución al problema. Sin embargo, no todos los empleados pueden acceder a estas modalidades, por la naturaleza de sus puestos de trabajo. “Un conductor, un mesero y un chef, por ejemplo, son trabajadores que desarrollan actividades que no permiten el trabajo a distancia y esas son las situaciones que aquejan a muchos empleadores”, dijo Jaramillo.

El problema es que no existe una evidencia o documentación que certifique la no presencia del trabajador, pero al tiempo no hay lugar a sanción porque la cuarentena es una causa válida. Según el experto, lo que se debe idear es una fórmula en que el Estado tenga incentivos y apoyos a los empresarios, para que la política de aislamiento por síntomas evite la propagación y no entre en conflicto con el área laboral.

Con relación al pago, en términos normales, sería el sistema de seguridad social el que asumiría los días pero, como no existe una incapacidad avalada por un médico, el sistema no puede responder por ese pago.

“Si no hay subrogación de riesgos a la seguridad social, queda en cabeza del empleador asumir el pago e implementar las medidas de seguridad en el trabajo. Si una persona tiene síntomas de Ómicron y el empleador lo obliga a ir a trabajar, estaría incumpliendo sus obligaciones y haría caso omiso al aislamiento”, dijo Jaramillo.

Una de las soluciones planteadas es extender la política de cobertura del sistema de seguridad social para cumplir con las medidas del aislamiento propuesto por el Gobierno; lo anterior se daría con el fin de que las empresas no asuman totalmente las pérdidas por los días en que sus trabajadores estén en cuarentena por síntomas de covid-19.

Según Jaramillo, ahora se adolece un problema que ya había afrontado el sector laboral. “Antes, cuando había pacientes asintomáticos, pero positivos, no se generaba incapacidad. El aislamiento, que en ese momento era de 14 días, debía ser asumido por el empleador porque nunca se reguló esa parte”, explicó.

Ante la falta de regulación, y la falta de acreditación médica de la necesidad de la cuarentena, el abogado aseguró que podrían implementarse en todo el país pruebas rápidas o caseras sobre los síntomas, para tener mayor claridad, control y trazabilidad sobre los aislamientos.

“Las pruebas sumarias pueden utilizarse no como incapacidad, pero sí como una documentación o sustento de la cuarentena. La trazabilidad es importante para no tener abusos por parte de los trabajadores”, enfatizó.

Otro de los temas que podrían surgir es la reposición de los días. Según las fuentes, este es un tema controversial, pues varía según la interpretación de cada experto. Hay propuestas para que los trabajadores repongan el tiempo que estuvieron es aislamiento a través de jornadas complementarias. Sin embargo, otros consideran que no habría lugar a la reposición de días.

Zuleta aseguró también que, con respecto a la sintomatología, los trabajadores podrían dirigirse a sus EPS para hacer seguimiento de los síntomas que pudiesen presentar y los empleadores podrían promover este cuidado.