“La renegociación del Tlcan convierte a Colombia en alternativa de inversión”

Aunque Martín Ibarra, socio director de Araújo Ibarra & Asociados, firma especializada en comercio exterior, dijo que el país aún tiene espacio para avanzar en esa materia, y que parte de ese crecimiento llegaría a raíz de la renegociación del Tlcan, ya que atraería a los extranjeros.

¿Qué debería hacer el Gobierno para que llegue inversión en grandes cantidades?
Recibimos con beneplácito un cambio en la composición de la inversión extranjera, más orientada hacia el sector industrial. El gran reto es traer, por primera vez, empresas anclas cuyos productos requieren a su vez de proveedores de primero y segundo anillo que vienen con ellas. Estas anclas han sido la clave en países como China, México y Vietnam, con lo cual han pasado de ser exportadores de productos básicos a exportadores de mercancías sofisticadas.

Para ello el análisis de las condiciones que ofrece la competencia internacional es definitivo. Mecanismos como el de las zonas francas y las zonas económicas especiales son el arma secreta para la “seducción” de estas anclas globales.

Por otra parte, debería pensarse de nuevo en los contratos de estabilidad jurídica, para garantizar las condiciones tributarias, cuya fluctuación y los altos niveles de tributación en comparación con el vecindario, son los peores enemigos de la inversión extranjera.

Tiene que crearse un movimiento nacional para que sea más fácil y más barato hacer negocios en Colombia; temas como el manejo de las consultas previas y su demora en los proyectos, desaniman al más persistente inversionista y nos restan competitividad e imagen.

¿Qué impacto tendrá el desarrollo de las 4G para el comercio del país?
Es vital para las exportaciones. Sin embargo, debe complementarse con la adecuada localización de las industrias exportadoras al lado de los puertos y con un precio de energía competitivo internacional.

¿Colombia no ha podido aprovechar el dólar caro para incrementar sus exportaciones?
Debido a la paridad cambiaria que ha recuperado Colombia en los últimos años ya se observa en el repunte de las exportaciones del mes de mayo con un aumento de 23,4% frente al año anterior. Estoy seguro de que si le sumamos la mejoría en el aprovechamiento de los mecanismos de comercio exterior y una estabilidad jurídica y tributaria de mediano y largo plazo, las exportaciones continuarán floreciendo.

Proyectos como El Dorado II en Bogotá, el nuevo puerto de Agua Dulce en Buenaventura, el puerto de gasificación de El Cayao en Cartagena y la modernización de los puertos tanto en el Atlántico como en el Pacífico, son excelentes instrumentos de competitividad para las nuevas exportaciones colombianas.

¿Qué falta para ser más competitivos en comercio exterior?
En primer lugar, fue muy importante el traslado de competencias de los mecanismos de comercio exterior al Ministerio de Comercio. Este traslado ha reducido a la tercera parte los tiempos de aprobación de estos procedimientos, permitiendo de nuevo a los exportadores tener acceso a insumos internacionales sin impuestos, recuperando así nuevamente su competitividad.

Además, es vital que las industrias se ubiquen al lado de los puertos para disminuir el arancel geográfico. Los gigantescos costos logísticos en un país separado por tres cordilleras, que tiene uno de los costos de movilización interna más altos de América Latina, hacen que exportar desde el interior del país sea una odisea. También, deben identificarse cadenas regionales de valor.

La creación de la nueva zona económica especial de Buenaventura, permitirá la promoción de una nueva ciudad en el Pacífico colombiano, y será clave para lograr este objetivo.

¿Qué podría traer al país la renegociación del Tlcan?
La iniciación de la renegociación del Tlcan por parte de Estados Unidos, y la promesa de incremento de aranceles a los países asiáticos, hacen que Colombia y Perú se conviertan en las mejores alternativas de inversión en América Latina, al tener estos dos países acuerdos de libre comercio de nueva generación con normas de origen flexibles y con los cuales EE.UU. tiene un superávit comercial.

¿Cómo le fue a Araújo Ibarra en el primer semestre del año?
Este año ha sido excelente para la firma. Estamos trabajando, además de Colombia, en México, Perú, Centro América y, últimamente, en Argentina. Además, esperamos crecer este año entre 20% y 25% y terminar de consolidar nuestra presencia en los países de la Alianza del Pacífico y en los Estados Unidos.

Por otra parte, terminamos en el primer semestre para Bancoldex, el programa de Excelencia Exportadora en consorcio con Carlos Ronderos y Hernando José Gómez, donde apoyamos a cuarenta grandes exportadores del país en redefinir su modelo de negocio internacional.

Además, le tocó a nuestra firma apoyar la coordinación de la III Cumbre Mundial de Zonas Francas en la ciudad de Cartagena en mayo pasado, organizada por la Andi y la Organización Mundial de Zonas Francas, a la cual asistieron más de 900 personas de sesenta países.

Hemos encontrado una gran receptividad y entusiasmo con nuestros clientes en identificar nuevas oportunidades en la Alianza del Pacífico.

¿Cómo ven el panorama para el segundo semestre del año?
Estimo que va a ser mejor que el primero.

Antecedentes
Frente a la importancia de aprovechar la Alianza del Pacífico, Ibarra señaló que “permitirá a los cuatro países mejorar su sistema de atracción de inversión, abrir sectores específicos, crear cadenas regionales de valor y presentar escenarios nuevos como las zonas económicas especiales”, y “propuestas para Buenaventura, que albergarán proyectos del Sudeste Asiático que podrán asentarse en Colombia y en los demás países de la Alianza, para exportar desde aquí a mercados los globales”.