Tras homicidio del fiscal Pecci, familiares demandaron al Estado y Hoteles Decameron

Tanto el Estado como la cadena de Hoteles Decameron fueron demandados por la familia del fiscal paraguayo Marcelo Pecci el miércoles 25 de marzo, luego de su asesinato tres años atrás dentro de las instalaciones de esta compañía.

En la petición, la familia alegó que el homicidio se llevó a cabo debido a la falta de medidas de seguridad y presuntas omisiones por parte del hotel debido a que, según información presente en la demanda, los delincuentes se estaban hospedando en el mismo hotel que Pecci.

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Teniendo en cuenta esta información, la familia del funcionario recriminó al Estado la falta de acompañamiento y seguridad por parte de la Fiscalía y Policía, a una figura pública que no solo era conocida, sino que también tenía alta exposición a riesgo debido a las investigaciones que lideraba entorno a temas de narcotráfico.

Según información de El Tiempo, la demanda fue presentada ante el Juzgado 64 Administrativo de Bogotá y está a la espera de ser admitida. En el documento, la familia del funcionario pide ser indemnizada, tanto por el Estado como el hotel, por un valor de $10.000 millones.

Contexto del caso

El 10 de mayo de 2022 Pecci fue asesinado en Cartagena, luego de que dos hombres, que llegaron por mar en una lancha acuática, se acercaron al fiscal y le propinaron un disparó que le causó la muerte.

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Hasta la fecha, la Fiscalía colombiana judicializó a varias personas por este crimen. Entre ellas se encuentran Wendre Still Scott, sicario; Marisol Londoño, Cristian Camilo Monsalve y Eiverson Adrián Zabaleta, quienes según la Fiscalía se encargaron de la ejecución del crimen. Como consecuencia de ello, los implicados fueron condenados el año pasado pasado a 47 años de cárcel.

A su vez, los hermanos Ramón y Andrés Pérez Hoyos, Margaret Chacón y Francisco Luis Correa, fueron condenados por la justicia debido a su participación indirecta en el homicidio. Esto debido a que fueron los encargados de financiar el asesinato y manejar la logística.