Con el Decreto 117 del 28 de enero de 2021, el Gobierno Nacional ha creado el Permiso especial de permanencia para el fomento de la formalización - Pepff-, para beneficiar a los ciudadanos venezolanos que se encuentran en el país.
El Pepff consiste en otorgar, de manera excepcional y transitoria, a los venezolanos, un permiso que les permita regularizar su situación migratoria en el país, con el fin de que tengan acceso a contratos laborales y de prestación de servicios en Colombia.
Así, el Pepff se otorgará a venezolanos que se encuentren de manera irregular en el país y que cuenten con las siguientes condiciones:
1. Sean ciudadanos venezolanos.
2. Tengan 18 años o más.
3. Presenten cédula de identidad venezolana o pasaporte, así el mismo esté vencido.
4. No tengan antecedentes judiciales en Colombia o en el exterior.
5. No estar sujetos a medidas de expulsión o deportación.
6. Tengan una oferta laboral o de prestación de servicios en Colombia.
En Colombia, de acuerdo con las cifras de Migración Colombia, para el 31 de diciembre de 2021, un total de 1.729.537 venezolanos se encontrarían en el territorio nacional.
Por lo anterior, la decisión del gobierno es importantísima pues permite que casi dos millones de personas tengan un camino hacia la legalización de su situación en Colombia.
La decisión es acertada desde el punto de vista constitucional, pues el artículo 13 establece que “Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley…” y que recibirán el mismo trato y recibirán los mismos derechos sin discriminación por razón de su origen nacional. Adicionalmente, el artículo 100 de la Constitución dice que “…los extranjeros gozarán en el territorio de la República, de las garantías concedidas a los nacionales…”.
Anteriormente, los venezolanos perdían oportunidades laborales debido a la imposibilidad que tenían para legalizar su situación, pues los PEP anteriores fijaban unas condiciones mínimas y a la fecha ya no se encontraba vigente el PEP para ser solicitado u otorgado.
Es de anotar que en la población migrante del vecino país hay personas con altas calificaciones y habilidades, muchas de ellas con títulos universitarios que a la fecha habían tenido problemas para conseguir empleo debido a su irregularidad en el país.
Ahora bien, no significa que con la expedición de una norma van a desaparecer los problemas que ha tenido el país por la migración masiva de venezolanos.
La gran mayoría continuará en situación de irregularidad y no es realista pensar que esto va a cambiar a gran escala, pues el desempleo en Colombia subió alrededor de 15% y su recuperación no será rápida, teniendo en cuenta que el covid-19 sigue causando estragos en el mundo entero y se espera que continúe de esta manera durante 2021.
Los ciudadanos venezolanos entrarán a competir con la fuerza de trabajo colombiana que se encuentra cesante, por lo que ese 15% va a ser todavía más complicado de disminuir.
Sin embargo, y con todos los problemas que supondrá la medida, la realidad es que los venezolanos están en el país y no van para ningún lado. Permitirles la oportunidad de que trabajen de manera legal y con las garantías y derechos que se merecen como seres humanos era lo mínimo que se podía hacer.
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