A menos de un mes para que empiecen los Juegos Olímpicos de Paris por lo que permanentemente me consultan deportistas, dirigentes y periodistas, parece que no hay mucho conocimiento sobre el dopaje. Es importante sobre todo para los deportistas conocer lo mínimo sobre este tema para evitar problemas, largas sanciones y muchos llantos.
No puede ser que luego de muchos escándalos, de innumerables sanciones a deportistas, de la cantidad de información que circula por internet la única instrucción que se les da a los deportistas es “cuiden sus termos”.
Empecemos diciendo que dopaje no es sencillamente consumir, o mejor que se encuentre en el organismo del deportista, una sustancia que mejore el rendimiento. El dopaje es mucho más, la primera infracción al dopaje, presencia de una sustancia prohibida, se configura en el momento en que en un análisis de sangre o de orina del deportista aparece una sustancia de la lista de sustancias prohibidas de WADA. No importa si no mejora el rendimiento, si se consumió de manera involuntaria, si se consumió en pequeñísimas cantidades, si se utilizó para mejorar una condición médica como una lesión, una dermatitis o una simple gripa o si se compró en una tienda naturista. Nada de eso, basta la más mínima presencia de una sustancia de la lista para una sanción por dopaje.
Por lo anterior, lo mínimo que se esperaría de deportistas y dirigentes es tener claras esas sustancias; nada más fácil que bajar de la página de WADA la lista actualizada del 2024 y entregársela, preferiblemente en papel a los deportistas. Un atleta cuidadoso debe mirar la lista de manera permanente pues consumen gran cantidad de productos deportivos. Menos de 5 minutos implica el proceso de revisar la lista y comparar los componentes de un medicamento o de un suplemento deportivo.
Otra infracción en la que pueden caer muchos deportistas es entregar mal la muestra. Este es un procedimiento muy complejo que requiere llenar formularios y entregar orina o sangre de manera segura para el deportista, y confiable para los laboratorios y autoridades que la analizan. No se puede manipular los frascos, mucho menos romper. Por su parte los deportistas deben conocer sus derechos. No se puede forzar al deportista a entregar inmediatamente la muestra, en muchos casos resulta difícil y se deben suministrar bebidas y sobre todo tiempo para que el deportista tranquilamente entregue la muestra. En el formulario siempre es recomendable indicar fielmente lo que se ha consumido, sobre todo aquellos medicamentos que por alguna razón de salud se utilizaron.
Tener sustancias prohibidas o, peor aún comercializarlas es otra infracción al dopaje, no es bueno que los deportistas lleven en su equipaje medicamentos, para eso están los médicos de las delegaciones que pueden explicar con mayor facilidad la razón de tenerlos.
Generalmente los deportistas son los únicos perjudicados, los equipos, comités y federaciones salen tranquilos frente a uno de sus deportistas sancionados, por eso es fundamental que los atletas tengan clara la información sobre el tema. Es doloroso ver como un atleta sancionado por alguna sustancia suministrada por el médico de la delegación es apartado y olvidado. Ojalá en lo que queda de tiempo algún deportista inquieto estudie y comparta con sus compañeros la información sobre este tema. Es bueno tener presente que la ignorancia de la norma no es excusa para los deportistas que pueden ser sancionados por algo totalmente desconocido (por ellos).
*Andrés Charria, Fundador de Tres Puntos Consultores.
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