El Gobierno le pide a la Corte reducir su rigurosidad con la postura sobre el glifosato

El uso de glifosato es la clave de la política contra las drogas del Gobierno de Iván Duque. Sin embargo, la Corte Constitucional ha sido concluyente en determinar que su uso puede llegar a afectar la salud de las comunidades aledañas a las zonas donde se generan los grandes cultivos de coca.

Ayer, el máximo organismo de la jurisdicción constitucional realizó una audiencia pública en el que unió las voces de representantes del Gobierno central, autoridades municipales y especialistas en la materia para estudiar una posibilidad sobre el uso del herbicida.

Durante su participación, el presidente Iván Duque defendió el uso del glifosato y dijo que la problemática se centra en un auge de los cultivos ilícitos en el país. Dijo que Colombia no es un estado viable mientras siga existiendo el fenómeno del narcotráfico, y dijo que el problema del debate del herbicida es que se están tocando fibras de una discusión política, más allá de lo técnico y lo científico.

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Esta postura fue defendida por el fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez dijo que el uso del herbicida tiene los mismos riesgos cancerígenos que comer carne roja o utilizar desodorantes en aerosol. Declaró que Colombia no es una sociedad viable con 200.000 hectáreas de coca. En 2016 en carta que dirigí como miembro del Consejo Nacional de Estupefacientes, evidencié los grandes riesgos que para la estructura de la democracia política y social del país tenía el crecimiento de los cultivos de coca”.

El expresidente, Juan Manuel Santos, dijo que el principal problema con el tema del narcotráfico está más allá de la aspersión química. “El verdadero problema es la resiembra. Las comunidades que sembraban continuaban, porque no contaban con recursos para la subsistencia”, dijo el exmandatario durante su intervención.

El expresidente Santos también aclaró que la aspersión no es sinónimo de efectividad en la lucha contra el narcotráfico. En la intervención trajo a colación la política que se manejó durante 2006, donde se registró un aumento en la aspersión, pero no se controló el problema de la resiembra de cultivos ilícitos, que aumentó a 172.000 hectáreas.

El exministro de Salud, Alejandro Gaviria expuso casos donde la contaminación con glifosato fue letal para la población, y trajo a colación el ejemplo de Brasil, donde se reportó un alza en el índice de mortandad infantil desde el uso del herbicida.

La Organización Mundial de la Salud encontró que la exposición a este agente químico tiene potenciales riesgos cancerígenos para las personas.

Después de finalizar la audiencia, la Corte deberá estudiar los argumentos técnicos que sustentan el uso del químico para la aspersión.