Facebook, Twitter e Instagram, entre otras redes sociales, no pueden ser canales para generar violencia, estigmatizar a las personas, discriminar, divulgar información falsa o deshonrar. Por injuria en estos medios digitales se pueden pagar penas desde 16 hasta 54 meses de prisión y multas entre 13 a 1.500 salarios mínimos legales mensuales vigentes. Por calumnia, hasta 72 meses de cárcel.
En la práctica, se puede cometer injuria por vías de hecho, como por ejemplo, cuando se usan medios como Facebook o Twitter para reproducir o repetir falsas afirmaciones de otras personas, excusándose que fue otro el que publicó, en principio, la información. Esto no exime de responsabilidad, porque todos somos autores de lo que decimos y publicamos en internet, de manera que debemos expresar nuestra opinión bajo preceptos de responsabilidad social, sin sobrepasar los límites de protección de los derechos humanos.
No basta con borrar la publicación calumniosa o injuriosa, esto puede agravar el problema. Primero, porque se está pretendiendo ocultar la prueba de la comisión de un delito; segundo, no es la manera para solucionar el daño causado; y, tercero, porque, a pesar de la eliminación de la información, quedará la trazabilidad de lo que escribió la persona en la red.
Tenga en cuenta que, en cambio, hay conductas en redes sociales que, pese a generar molestia e incomodidad, no están tipificadas como delitos en Colombia. Por ejemplo, retuitear algo falso, pues, a pesar de la imprudencia, se presume la buena fe de la persona que lo consideró real; y diseñar o publicar memes, bajo un sentido satírico, advirtiendo que la caricatura no es un delito.
No olvide que recientemente la Corte Constitucional señaló que los ciudadanos que en sus redes sociales cometan cualquier acción en contra del buen nombre, dignidad o intimidad de otra persona, deberán asumir la misma la responsabilidad penal, con iguales o peores consecuencias, que las que enfrentan los medios de comunicación, cuando incurren en este tipo de conductas. Y la excusa ya no será el amparo en el derecho de la libertad de expresión.
Algunas cifras para tener en cuenta
Según el Centro Cibernético Policial y la Dijín, en los últimos cuatro años se han recibido más de 3.600 reportes por casos de injuria o calumnia en Facebook y Twitter.
Durante 2018, se han registrado al menos 600 denuncias por injuria y por lo menos 300 por calumnia en redes sociales; lo anterior, de acuerdo con el Sistema de Información Estadístico, Delincuencial, Contravencional y Operativo de la Policía Nacional.
Otros indicadores recientes de Microsoft Colombia, evidencian que 66% de los colombianos activos en medios digitales, han sido víctimas de plagio en redes sociales, robo de contraseñas, suplantación de identidad y/o cualquier otro riesgo intrusivo. La media a nivel internacional está en 56%.
En cuanto a estafas en línea por estos medios, se calcula que 33% de los colombianos ha sido víctima de este delito.
Los ‘millennials’, nacidos entre 1981 y 1996, con edades de los 22 a los 38 años, son el grupo más imprudente por redes sociales, mientras que los más adultos, conocidos como la generación ‘baby boomers’, son los que tienen mejor comportamiento en la red.
Los primeros, en 22%, justifican el ‘matoneo’, el engaño y los insultos en Facebook y Twitter, entre otros; mientras que los segundos, consideran en 92% que a los demás hay que tratarlos con respeto y dignidad en estos medios.
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